10+3 cosas que debéis saber si viajáis (o no) con vuestra mascota

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La tenencia responsable de animales de compañía implica tenerlos en cuenta en todo momento, incluso cuando llega aquel momento del año en que marchamos de vacaciones. Por eso desde el Consejo de Colegios Veterinarios de Cataluña (CCVC) quieren recordaros que si tenéis gatos, perros o hurones y decidís llevároslos de viaje, hay que preparar «su maleta» como preparáis la vuestra; y en caso de que elegís que no os acompañen, habrá que buscarles una alternativa adecuada y confortable porque los cuiden mientras no estáis.

Así pues, hay dos opciones: ir de vacaciones con la mascota o buscarle un lugar adecuado donde pasarlas mientras vosotros viajáis (el abandono no es nunca una opción).
Aquí tenéis 10 consejos para aquellos que decidís llevaros vuestro animal de compañía de viaje:

1. Antes del viaje definitivo, hay que probar el medio de transporte para ver como se adaptará el animal. Unos lo viven como una experiencia fantástica pero otros se marean o sufren estrés. En estos casos hay que consultar con el veterinario de confianza qué tratamientos relajantes hay o las pastillas antimareos más adecuadas.

2. Por seguridad, el animal no puede ir suelto en el interior del vehículo. Podría asustarse, saltar, molestar el conductor y provocar un accidente. Los animales tienen que ir en la parte trasera del vehículo con redes o barras de separación; sujeciones para el cinturón de seguridad, jaulas o cestas de transporte («transportines»).

3. Evitar los golpes de calor. Se tiene que tener el vehículo muy ventilado y parar frecuentemente para darle agua al animal y permitirle que estire las piernas y haga sus necesidades. No lo dejaremos cerrado al coche mientras nosotros vamos a comer o a hacer cualquier otra cosa. Aparcaremos en zonas con sombra, pensando que el sol cambia de posición y que un lugar sombrío ahora puede ser soleado de aquí un rato. Dejaremos las ventanas bajadas para que corra el aire y miraremos que sea el menor tiempo posible. Siempre que sea posible, el animal vendrá con nosotros.

4. Prepararemos la maleta de nuestro animal como preparamos la nuestra, y pondremos su comida, el agua suficiente, algún juguete y artículos de higiene para hacerle el viaje lo más agradable posible.

5. Perros, gatos y hurones tienen que ir identificados con el chip ISO homologado. Sirve a toda la Unión Europea para ligar los datos del animal con su propietario (nombre, apellidos, dirección, teléfono) en caso de pérdida. Gracias al Archivo de Identificación de Animales de Compañía (AIAC), donde constan registrados la mayoría de los animales de compañía de Cataluña, se han recuperado más de 50.000 mascotas en los últimos 10 años. Además, el AIAC está conectado al REIAC español y al PETMEX mundial, cosa que lo hace efectivo por todas partes.

6. Placa con código QR con la información del chip (NOVEDAD!). El AIAC pone a disposición de sus usuarios una placa con código QR para colgarla en el collar del animal y agilizar la identificación en caso de pérdida. Así, cualquiera que encuentre al animal podrá identificarlo rápidamente y acceder a los datos de contacto del propietario.

7. Perros, gatos y hurones tienen que ir al extranjero con su pasaporte. Este documento permite al animal viajar por la Unión Europea, lo identifica a la vez que informa sobre las vacunaciones, desparasitaciones, serología de la rabia y el estado sanitario actual. Resulta indispensable en caso de salir de la UE y querer volver a entrar. Los propietarios pueden obtener el pasaporte por sus mascotas mediante su veterinario.

8. Preparar el terreno. Una vez decidido el destino, hay que informarse de los servicios veterinarios de urgencia que habrá disponibles. Conviene tener dirección y teléfono por si hay que usarlos.

9.Consultar con la embajada o consulado del país de destino. Cada país establece los requisitos que tienen que cumplir los animales visitantes y hay que estar preparados. Para viajar fuera de España hace falta que el animal esté identificado y vacunado de la rabia (mínimo 21 días antes de viajar).

10. Finalmente, hay que asegurarse que el hotel, camping, chalé o casa rural donde vamos admita mascotas. Aquí os apuntamos algunas páginas web especializadas al buscar alojamientos que acepten animales de compañía: Viajar con perros; Hot Dog Holidays; Se admiten mascotas; Hoteles Perros.

Si optáis para viajar sin el animal, tenéis que tener en cuenta que hará falta:

1. Buscar a un familiar, amigo o canguro adecuado, que pueda cuidarlo, alimentarlo y sacarlo a pasear cuando haga falta. Peces, hurones o gatos no piden tanta atención, lo que quiere decir que quizás nos será más fácil conseguir que alguien se los quede unos días, mientras que los perros requieren un mínimo de tres paseos diarios. Los acuarios más mecanizados permiten programar su funcionamiento, pero en todo caso conviene hacer un cambio de agua y una comprobación el día antes de marcharse y conseguir que alguien pase por casa una o dos vces por semana para asegurarse de que todo funciona correctamente.

2. En caso de no disponer de esta persona de confianza, habrá que buscar alojamiento al animal: un hotel, un refugio o una residencia donde puedan cuidar de él. Aquí os apuntamos algunos buscadors para encontrar alojamiento por todas partes: Pet and Net; DogBuddy; GuDog. Otras opciones son preguntar a nuestro veterinario de confianza, que seguro que sabrá de residencias de animales, más o menos cerca de casa, que nos puedan servir.

3. Una vez elegido el lugar, recomendamos visitarlo con anterioridad para estar seguros que es el adecuado, y para poder explicar con todo detalle a los responsables cuidadores las atenciones que precisa el animal, así como darles el contacto de nuestro veterinario de confianza por si hubiera que llamarlo.

Abandonarlo es condenarlo a muerte. Os recordamos que los animales de compañía han sido socializados para poder vivir con nosotros y, por tanto, han perdido la capacidad de buscarse la vida. Sin nosotros no pueden conseguir comida, ni ser felices, porque se han acostumbrado a nuestro afecto: abandonarlos es condenarlos a morir de hambre o atropellados.